Bien... por donde empezar a contar mi historia?.. Imaginaré que estoy recostada en algún sofá de algún nuevo psicólogo, con los ojos cerrados, esperando la mas temida cuestión que por mas que me la han hecho miles de veces nunca sabré responderla: ”Hablame..” Ahí es cuando me invade un pequeño ataque, no de pánico sino de desconcierto, pienso “de que le hablo?” ruego que me de un tema del cual charlar, pero nada la continua y única palabra que escuchan mis aturdidos oídos es “HABLA..CONTAME” pero queeee Es así como empieza mi peregrinar por diferentes terapeutas simplemente porque me aburría y pasaba la hora viendo de reojo como casi dormían, escribían SMS, leían su cuaderno con las observaciones sobre el paciente que me seguía en turno..etc.

Pero no crean que fue tan fácil, no me levante un día y dije “ahhh necesito ir al psicólogo porque tengo agorafobia”... no no.. Esto como a muchos me tomo bastantes años descubrirlo.

No puedo especificar cuando empezó, siempre que lo intento hay un recuerdo mas viejo de alguna situación “de miedo”. Pero por situarnos mas o menos digamos que empezó a los 14 años, me encontraba en segundo año del secundario y las clases de gimnasia se me tornaron un martirio, el hecho de ir y permanecer 2hs en una cancha de 9 por 6 mts. jugando handball o voleyball ERA TORTUOSO! No sabia porque pero me sentía tan mal que no paraba de correr, el corazón se me salía pero era preferible a estar parada en medio de semejante espacio, recuerdo un día me empezaron a temblar las piernas y no podía evitar disimularlo, era exagerado mis compañeras se dieron cuenta y yo le dije a la profesora que no me sentía bien y no podía parar ese mover de piernas, la respuesta que obtuve: “movete y se te pasa” ... ehmm... bien no la culpo por lo ignorante, desconsiderada, negligente en fin bestia peluda!!! Es chiste, en esos años no se tenia ni idea de las fobias popularmente y la mayoría de mis compañeros solía hacer cualquier cosa por no esforzar el cuerpo en la clase así que entendí porque no me creyó.

Tiempo después cada vez que salía a pasear al centro de mi ciudad, generalmente con mi madre, empezaba a sentir mareos extraños, ver y oír las cosas de forma rara como alejándose cada vez mas de mi dejándome en un vacío donde creía desmayar. Mi madre se encargo de llevarme a un medico clínico a ver que tenia, diagnostico final: presión baja. No era novedad, siempre he tenido una presión casi inexplicable para alguien vivo pero él doctor me aconsejo tomar sal cuando me sintiese mal. Bien! Que felicidad yo y mi inseparable frasquito de sal gruesa para todos lados, la escuela, gimnasio, paseos. Ese año debo haber devastado alguna salina pero SEGUIA SINTIENDOME MAL!!

Así pasaron años, por supuesto deje la sal de lado o moría con una hipertensión descomunal. Paso el tiempo a todo esto seguía estudiando, con buenas notas debo decir, talvez me refugiaba en los libros y termine el Bachillerato con una particularidad: en los 5 años que lleva JAMAS NADIE SE ENTERO DE MIS MIEDOS. Nunca sabré si soy tan buena actriz para disimular cuando me daba el ataque o no le importaba a nadie, en fin.. Ya estamos en 1998, y yo con 18 años y después de mirar miles de programas de salud por cable, leer notas en revistas, etc.. hacia tiempo le había dado un nombre a lo que tenia: AGORAFOBIA.. miedo a los espacios abiertos, muchos dicen que al ponerle nombre a la enfermedad la persona se siente “mágicamente” mejor.. O yo voy para otro lado o quien lo dijo no estaba bien, “eso era?” me dije tantas veces, pero “miedo a que?” “no entiendo” “me habrá pasado algo traumático de chica?” NO, no y mas no era lo que mi cabeza respondió y hasta llegue al punto de decir llorando “yo tengo un tumor o algo en la cabeza y nadie se da cuenta! como es posible tantos años? seguro es algo malo.” Las resonancias magnéticas, electroencefalogramas, tomografías y sopapos de mi neurólogo me hicieron desistir de esa idea.. NO TENIA NADA CORPORAL ..PERO PORQUE CADA VEZ QUE SALIA A LA CALLE EL CUERPO NO RESPONDIA? Eterna incógnita.

De ahí seguí rumbo a terapia con psiquiatra quien me adentro en el mundo de las “milagrosas pastillas” (soy atea porque yo al milagro no lo vi!) y un día me dijo :”ya no se que hacer con vos” en otras palabras “Nena, me agotaste anda que te arregle otro!” Así me fui, empecé  con la terapia psicológica.. de la cual al inicio de esta historia conté bastante.

Una anécdota que me quedo grabada fue una interconsulta que hizo mi primer psicóloga con un colega que venia de Rosario y a la cual me dijo que asistiera ya que “el era muy buen profesional del área”, OK yo dispuesta a todo (bueno casi) fui con mi mama. En la vida voy a olvidar ese personaje, el tipo se sentó y sin mediar palabra disparo “lo tuyo es vagancia, estas cómoda y si no podes salir de tu casa dedicate a fabricar flores de papel que te va ir bien” en ese momento se levanto porque se acordó que tenia algo en el fuego (no es chiste era su departamento) y pretendió salir corriendo ante la mirada atónita de mi madre quien había pagado una fortuna para esa época, para que el tipo me mande a hacer origami ... Recuerdo tener fobia desde los 14 años aproximadamente seguramente desde antes pero lamentablemente tímida fui solo hasta que aprendí a hablar, por lo cual no reproduciré (porque me cierran el site) lo que les respondí al susodicho licenciado y a la psicóloga que se quedo sin paciente y unas cuantas puteadas encima.

Después como buena masoquista (gráficamente hablando, no soy maso!) pase por otra/os y seguí sin encontrar ni la punta de la madeja que tengo por cerebro. Algo bueno fue encontrar un psiquíatra que me ayudo mucho con medicación pero también conteniéndome desde la palabra aun cuando me presentaba en su consultorio sin cita previa y sin cobrar, porque a veces lo único que necesitamos son simples palabras que son tan valiosas que no se las puede cobrar: Como estas? Te puedo ayudar? ...

Es simple pero a veces lo pasamos por alto, solo los que alguna vez estuvimos en la base del pozo podemos decir cuan hondo es y no voy a mentir no es fácil trepar a la salida yo apenas estoy en la mitad, ya había superado ese nivel pero como suele suceder patine y caí otra vez. Soy curiosa y quiero saber que hay afuera del agujero este así que seguiré trepando sus paredes al estilo de la película de terror “El Aro” o “The Ring” a veces me siento como la pibita fantasma trepando las paredes del pozo de agua donde la tiraron.. lo bueno es que en la película ella logra salir!... 



lo malo es que es una asesina rencorosa pero bueno son detalles...

Ahora que saben gran parte de mi historia me gustaría que compartan las suyas, solo intento hacer de este sitio un lugar donde los que tenemos una fobia tan invalidante como la agorafobia nos apoyemos y si alguno cae el grupo lo sostenga, en si yo no poseo a nadie que me ayude verdaderamente y debo agradecer a muchas personitas hermosas que por este medio me han hablado de sus mas profundos miedos y hemos compartido cosas, a veces bajones pero casi siempre alegrías y logros y estoy segura que de esto se sale sino no me hubiera tomado este laburo en principio y además lo digo porque no siempre estuve en el fondo me di muchos gustos: estudiar, hacer cursos, salir con amigos, hasta tener novio y hacer algo tan simple pero tan extraordinario para mi como caminar por la costa de mi ciudad.. cosa que ahora veo lejana en el tiempo y realidad pero que no creo imposible de volver a realizar.

Ojala te pueda ayudar en algo y vos a mi.

Sos libre, deja tu opinión, historia, mandame un mail si no queres que sea publico, ni siquiera debes dar tu nombre real, aca lo importante es que te sientas a gusto y por mas chiquita que sea esa idea que esta pasando por tu cabeza compartila quien dice que no ayudas a alguien... incluso a mi. 

Cuando creas que nadie piensa en vos acordate de mi, voy a estar pensando en vos y que NECESITO QUE ME AYUDES.. Estas conmigo?